“Tenemos toda la capacidad, la tiene el estado” aseveró el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién al informar que la entidad fue una de las 8 del país que no firmó el convenio para ceder los servicios de salud al Insabi (Instituto de Salud para el Bienestar).
Domínguez Servién agregó que esta decisión no fue un capricho ni es por política, y que incluso habló con el equipo del presidente López Obrador al respecto.
“Nos van a pedir, o de mutuo acuerdo, que Querétaro maneje el sistema de salud y lo vamos a hacer con mucho gusto”, afirmó y recordó que este año sigue el compromiso de entregar el nuevo Hospital General.
Recordó que quienes firmaban el convenio entregarían la infraestructura de salud (hospitales, clínicas y centros de salud) al Insabi, que no es el caso de Querétaro, por lo que habrá entidades adheridas y las no adheridas.
Francisco Domínguez garantizó que Querétaro seguirá recibiendo los fondos federales correspondientes para el sistema de salud e incluso señaló que el Gobierno Federal califica al estado de Querétaro en el sector salud como el más sano, en el cual la entidad invierte anualmente mil 200 millones de pesos en favor de su población.